Las termitas que causan daño a las estructuras pueden clasificarse en tres grandes grupos basados en sus hábitos de alimentación y nidificación: termitas de madera seca Neotermes chilensis), termitas de madera húmeda y termitas subterráneas (Reticulitermes flavipes). Termita conocida cómo aérea o de la madera seca. Éste término proviene del nombre común que se les da a K. flavicollis i Cryptotermes brevis en los Estados Unidos – “Drywood termite” -. Quizás éste término, no es muy adecuado, para Kalotermes pues también come maderas húmedas. Cómo por ejemplo en carpinterías de madera exteriores (en balcones, terrazas, voladizos…). Quizás su abundancia en maderas a la intemperie es debido al modo de originar nuevos termiteros, a través de sus vuelos nupciales (generalmente desde Setiembre hasta Noviembre).
Se encuentra en las regiones más húmedas del área mediterránea. Sus termiteros son de 1000 a 1500 individuos. Sus termiteros están excavados en la propia madera. Es decir su hábitat es su propio alimento.
La reina no presenta el abdomen hipertrofiado, encontrándose con el macho en una galería ancha que hace de cámara real. A diferencia de la termita subterránea son las ninfas de últimos estadios los encargadas de recolectar y distribuir el alimento a la comunidad. Es por eso que cuando se habla de ésta especie se dice que tiene “falsas obreras”.
Forman colonias en el interior de la madera. Muebles, cajas, marcos, puertas, vigas, árboles vivos y muertos. También son capaces de anidar en paneles de madera aglomerada… Una característica de estas termitas son las pequeñas bolitas fecales que pueden caer del elemento atacado o bien llenando sus galerías.
Las galerías siguen las vetas de la madera y dejan la madera limpia (sus bolitas fecales no quedan pegadas a no ser que por su antigüedad se hayan apelmazado).